Técnicas no invasivas e invasivas en el diagnóstico prenatal

Seguimos con los artículos relacionados con el las técnicas que se utilizan durante el Diagnóstico prenatal. Vamos a comentar las diferencias generales que existen entre las técnicas no invasivas y las invasivas, para posteriormente a lo largo de los siguientes artículos hablar sobre las diferentes técnicas en si.

Técnicas no invasivas

Estas técnicas, aunque han ido evolucionado con el paso de los años, se llevan practicándose más tiempo. Toda la acción es exterior a la madre-feto, basándose la mayor parte de las técnicas en tomar imágenes por métodos radiológicos, magnéticos, de resonancia o muestras maternas.

No producen en el nonato más incomodidades y molestias que las que sufre la madre, siendo estas muy leves, y por ello el riesgo es prácticamente nulo.

Técnicas invasivas

Las invasivas implican la extracción de cantidades pequeñas de líquidos o tejidos en el entorno fetal o directamente del feto por medio de punciones o procedimientos microquirúrgicos, que pueden llegar, en el peor de los casos a provocar infecciones o abortos.

Por ello, antes de realizarlas se debe evaluar con su médico de confianza el beneficio que se puede obtener frente al peligro que conlleva, teniendo los padres siempre la última palabra.

Unidad de Diagnostico Prenatal

Los profesionales recomiendan que no se recurra a estas técnicas invasivas, salvo en casos de:

  • Que otras pruebas, generalmente, las no intrusivas, hayan producido resultados anormales o que se sospeche que algo no marcha bien.
  • Madres de 35 años o más, en las cuales la posibilidad de síndrome de Down y otros se potencia.
  • Que se haya tenido algún hijo con problemas cromosómicos o malformaciones.
  • Que existan antecedentes propios o de familiares cercanos de defectos en el tubo neural (problemas en la espina y el cerebro).
  • Que la madre sea portadora de alguna enfermedad de orden genético.
  • Que los dos o alguno de los padres tuviera algún síndrome genético, aunque fuera con manifestaciones menores o en grado de portador asintomático.
  • Necesidad de determinar la maduración pulmonar del bebé.

CAGT cuenta con una Unidad especializada en Diagnóstico prenatal, contando con las técnicas más avanzadas para detectar, desde la semana 11 de gestación, posibles patologías fetales mediante estudios bioquímicos, citogenéticos, moleculares y ecográficos…